Como ya prometió la Delegación de Obras Públicas de la Junta de Andalucía, ya tenemos arreglada la cuneta del empalme de Soportújar, que se embarraba cada vez que llovía, causando molestias, tanto a personas que se sentaban en la marquesina, como a vehículos que podían derrapar y sufrir un accidente. Es un pequeño detalle, pero estos pequeños detalles nos hacen la vida más cómoda.

